Miles de críticas a ElBulli por su nueva andadura. (Foto: ElBulli)

Críticas a ElBulli por abrir sus puertas sin platos ni comida

Compartir en:
Fue en julio de 2011 cuando Ferrán Adrià cerró para siempre las puertas de El Bulli. Se trataba de un restaurante que rompió las reglas de la alta cocina en todo el mundo. El 15 de junio, casi 12 años después, volverá a abrir sus puertas, pero de forma diferente. 

Se presentará como un museo con entradas y un lema no exento de polémica: "Comer conocimiento". La idea del chef es mostrar las entrañas de un proyecto que, en su día, provocó una auténtica revolución gastronómica. 

Adrià quiere mantener vivo el legado de El Bulli, pero sin menús ni comidas. En su lugar, los visitantes podrán disfrutar de ni más ni menos que platos virtuales, vajillas y recreaciones.

"No se va a poder comer, si no sería un restaurante", asegura el cocinero en un vídeo promocional. Un concepto de consumo que no termina de convencer a los tuiteros: "El museo del hambre".

Las entradas cuestan 27,50 euros (20,50 para mayores de 65 y menores de 16 años, estudiantes de hostelería, personas con gran discapacidad y residentes en Rosas) a las que hay que añadir el precio del parking (19,50 euros tres horas), que también hay que reservar previamente, aunque habrá un transfer gratuito desde Rosas que se reserva con la entrada.

El precio de la entrada incluye la visita de los casi cuatro mil metros cuadrados (2500 m2 exteriores y 1300 m2 en el interior) a través de los que se propone un recorrido, "que induce a reflexionar sobre la gastronomía y la innovación, rendir homenaje a todos los Bullinianos, explicar la historia de elBulli como empresa, así como todos los proyectos que lleva a cabo elBullifoundation, entre los que se encuentran la Bullipedia y elBulliDNA". 
Compartir en: